Los nómadas digitales son ahora una categoría de trabajadores por derecho propio. Como viajeros experimentados, solo necesitan un portátil y una conexión a Internet para trabajar a distancia desde cualquier país: en una playa paradisíaca o en el centro de una megalópolis remota, ¡cualquier lugar puede convertirse en su oficina! Paradójicamente, la crisis sanitaria ha contribuido a su proliferación: muchos destinos les abrieron sus puertas de par en par, y siguen haciéndolo hoy en día. Una de sus principales condiciones es tener un seguro médico internacional.
Desde hace varios años, el desarrollo progresivo del teletrabajo ha ocasionado la aparición de un nuevo tipo de trabajador: el nómada digital, a menudo trabajadores autónomos que desempeñan sus funciones profesionales a distancia desde otro país.
Como consecuencia de la covid-19, la práctica del teletrabajo se ha acelerado bruscamente desde 2020: involucrando cada vez a más trabajadores, tanto autónomos como asalariados, tiende incluso a generalizarse y a convertirse en una forma de trabajar que muchos quieren mantener en el futuro. A algunos además les tienta la experiencia del nomadismo digital en el extranjero. Sobre todo porque sus proyectos cuentan con el apoyo de cada vez más destinos.
Con el fuerte descenso del turismo en todo el mundo en 2020 y 2021, los países y ciudades cuyas economías dependen de él trataron de atraer a los nómadas digitales para compensar parte de sus pérdidas económicas. Y siguen haciéndolo. Este es el caso, por ejemplo, de:
Dubái: aunque antes era difícil obtener un visado sin un contrato local, las autoridades acaban de introducir un visado específico para trabajadores a distancia, que les permite permanecer hasta un año;
pero también Barbados, Costa Rica, Bermudas, y otros países europeos como Georgia o Croacia.
Para la gran mayoría de estos destinos, la obtención de visados para nómadas digitales exige demostrar un cierto nivel de ingresos y un seguro médico.
Se trata de una garantía que se exige con frecuencia, ya que el nomadismo digital afecta, por definición, a trabajadores por cuenta ajena o por cuenta propia cuya empresa no está situada en el país en el que se encuentran. En consecuencia, no pueden, salvo algunas excepciones, estar cubiertos por el sistema de seguridad social de su país de acogida temporal, aunque permanezcan en él durante cierto tiempo.
> ¿Va a un país de la UE? Ciertamente, podrá beneficiarse de la cobertura de sus cuidados médicos necesarios (es decir, urgentes o imprevistos), pero según la legislación y las formalidades vigentes en su país de estancia. Tenga cuidado, porque en muchos Estados miembros los costes a su cargo pueden ser muy elevados, sobre todo si recurre al sector sanitario privado.
> ¿Se va fuera de la UE? En caso de tratamiento imprevisto y necesario, el sistema de seguro médico de su país de origen no cubrirá generalmente sus gastos, que pueden ser exorbitantes en muchos países. Y aunque algunas tarjetas bancarias incluyen un seguro en el extranjero, muy a menudo se limita a tres meses y tiene una cobertura extremadamente limitada.
En ambos casos, por tanto, un seguro médico internacional es esencial. Tanto más cuanto que también cubre, en la mayoría de los casos, la necesidad de repatriación médica y la responsabilidad civil.
> Conviene saber: en el contexto de la epidemia, muchos países exigen que los documentos del seguro médico de los viajeros indiquen explícitamente que los riesgos de covid-19 están cubiertos.
APRIL International le ofrece un seguro médico flexible para cubrirle durante sus viajes al extranjero y válido también durante su regreso temporal a su país: ¡tanto para los que se van a dar la vuelta al mundo como para los que se van a vivir al extranjero! En función de su destino y sus necesidades, puede elegir su cobertura. La cobertura de los gastos sanitarios relacionados con covid-19 siempre está incluida.
Y para estancias superiores a 12 meses, nuestro seguro médico internacional cubrirá sus necesidades todo el tiempo.